jueves, 18 de junio de 2009

DISCOGRAFIA DE LACRIMOSA



ELODIA

Y luego de la apertura y la sumisión, sucede el milagro del amor, de amar y ser correspondido. Y para entonces en el disco de Elodia se transforma en una obra más íntima, que explora las tonalidades del más puro deseo. El fuego tímido y presente arroja a la escena un aire de misterio y sensualidad. Cada puerta es una posibilidad, un deseo, un sentimiento que por mucho tiempo fue resguardado en espera sólo de aquella que fuera capaz de recuperarlo y hacerlo arder de nuevo.

Mi asombro a la intimidad del arlequín a quien por fin los dioses le entregaron a Elodia, su amada, aquella que será capaz de ver tras el maquillaje de su cara y acariciar su cuerpo despojado de su emblemático traje de rombos.
El juego del amor es cruel y riesgoso, y una vez que la hoguera de la pasión ha sido encendida no es fácil apagarla.

En estas canciones se ama, vive y sueña, ese amor al que te has entregado, perdurará y vale la pena arriesgarse, pues a un y cuando en su cruel desafío, la muerte de tus manos la arrebate en el tiempo o la distancia podrá separarlos. Es una promesa no con una voz muy sostenida, un juramento del corazón y algún día el arlequín o nosotros mismos estará a nuestro lado Elodia, y por fin se quedara.



ECHOS

Es un disco en el que se hace un viaje impulsado por el viento de la razón ha hecho madurará este singular personaje, que se embarca por el mar de las sensaciones, el amor, los sueños y las ilusiones, para ahora desde otra perspectiva explora arce y reconocerse. Las grandes extensiones de tierra entre las cuales se adentra el barco es reflejo de las dudas y los golpes que ha tenido que soportar el arlequín. Navega con verdad y la esperanza de aquello que ama y anhela es un faro en oscuridad, un aliciente de vida, un viaje con un sentimiento esperanza contenida y por muchos años acumulaba.





LICHTGESTALT

En este disco se narra en sus canciones a la criatura del luz en la que muto un arlequín, emergido del más crudo infierno por el amor y la promesa de una mujer, cuyo corazón sólo pudo amar.







Él idilio continúa, no sabemos que les depara este reencuentro de amor, deseo y pasión. Sabemos que ha sido un constante juego de luz y sombras y perfiles celestiales serenos de la enamorada, pareja que se encontró en oscuridad y en la luz se unirán en un solo ser. Un nuevo capítulo se escribe, el piano sólido y clásico símbolo del regreso al origen y al hogar, muchos era que el bello arlequín una vez más arranque sus más dulces o amargas notas con cada una de sus caricias, una vez más el traje exportado y el semblante se cubre, se maquilla. Las alas descansan por el momento, pero eso no le conflictua ha aprendido a volar hasta su santuario personal. Esta vez el rostro de la tristeza infinita nos esconde en el punto esta vez, es el amor, la esperanza, el deseo y la sensualidad de vivir.

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